Las microempresas representan un gran porcentaje de las organizaciones constituidas que funcionan en Colombia.
Por las características propias de su conformación, normalmente este tipo de organizaciones presentan problemas con la formalización y dificultades para cumplir con las obligaciones contables, laborales y tributarias que les corresponden.
Mas allá del cumplimiento de las obligaciones, la contabilidad constituye para las microempresas, una herramienta de control y gestión de suma importancia para la toma de decisiones y la proyección del negocio con objetivo crecimiento en el mercado a largo plazo.
Si bien es cierto que a muchas pequeñas empresas, les es difícil contar con un sistema de gestión e información contable, es fundamental que tengan en cuenta los siguientes factores:
- Es probable que en cualquier momento les exijan la presentación de los libros de contabilidad y demás documentos privados en los términos que señale la ley, cuando se considere pertinente para efectos tributarios, judiciales y para los casos de inspección, vigilancia e intervención del Estado.
- Una contabilidad gestionada de la forma correcta, da la facilidad de reportar de forma unificada los costos incurridos, las deducciones que se deriven de la operación y los ingresos obtenidos.
- Brinda la facilidad para dar el cumplimiento de las obligaciones tributarias.
- Permite la obtención de información a tiempo y segura, para la toma de decisiones de la organización.
- Permite contar con la trazabilidad de los antecedentes para la proyección financiera, el estudio del impacto y la exploración de nuevos nichos de mercado.
- Es un medio idóneo y eficaz de comprobación en los procesos tributarios.
- Aporta seguridad para los propietarios y, a su vez, mayor confianza para realizar nuevos aportes a la organización.
Tomado de: https://actualicese.com/